En tierra de Coronavirus la tecnología es reina

Hoy la salud y protección del ciudadano ha prevalecido sobre toda otra variable, deteniendo industrias y procesos en los que la digitalización de estos ha venido (y puede aún más) convertirse en un aliado estratégico para entender que la cadena de valor de las empresas (sean nativas digitales o no) no tiene por que estar limitada al mundo físico para su desarrollo transaccional.

Los consumidores cambiarán luego de esto más de un hábito y comportamiento para el cual las empresas tienen que adaptarse rápidamente.

Los servicios públicos no son ni serán ajenos a este cambio en el comportamiento del consumidor. Tenemos el ejemplo de Colombia, donde la SNR (Superintendencia de Notariado y Registro) entendió su necesidad de adaptabilidad por el ciudadano (así como la búsqueda de su eficiencia operativa y transparencia transaccional) para permitir la integración formal con empresas de medios de pago digitales para apalancar en ellas la apertura de canales masivos de venta de certificados y pago de tributos al ciudadano. De una manera digital, eficiente y sin generar costos operativos de desarrollo, hicieron tangible una transformación digital adaptándose a sus usuarios siendo abiertos a encontrar aliados correctos que entiendan la propuesta valor de tu negocio y su consumidor.

Esta iniciativa de una institución pública como la SNR permitió no sólo el incremento masivo de colocación por parte de una institución que busca atender a la mayor cantidad de ciudadanos si no también permitió mantener este ratio de crecimiento reduciendo en más de 35% el tráfico físico en sus oficinas (A través de una plataforma exclusiva, Kushki se convirtió en el principal vendedor de certificados para la SNR en Colombia logrando vender más de 180 mil certificados mensuales en beneficio del ciudadano) y reduciendo en 7% la emisión física de certificados. Un indicador que habla de la apertura del ciudadano en utilizar nuevos canales con una propuesta valor que se adapte a sus necesidades. Esto requiere una apertura por parte de las instituciones públicas pero también un trabajo constante y soporte por parte de los partners estratégicos de estas considerando quién da la cara al ciudadano. La seguridad de la transacción, la coordinación y adaptabilidad de entender el flujo operativo de las instituciones públicas, y la constante retroalimentación para manejar flujos de UX en estos procesos son parte del proceso de transformación en iniciativas como esta.

La coyuntura que vivimos hoy, sin lugar a duda, marcará un precedente en los hábitos de consumo y modelos de negocio de algunas instituciones, que hoy en día han tenido que apresurar sus procesos de digitalización y modificar sus estrategias de product development, por un escenario que cambió más de un plan estratégico 2019. La transformación digital nunca tuvo un sponsor tan agresivo y eso se demuestra en la reacción que hemos tenido cada uno de nosotros por sacar adelante nuestros negocios entendiendo que la adaptabilidad en tiempos de crisis es un trabajo de desarrollo y constante aprendizaje que nos prepara para los negocios post-coronavirus.